El escocés David HUME (1711/1776), siguiendo el camino epistemológico iniciado por John LOCKE, sólo quiere aceptar como conocimiento aquellas ideas detrás de las cuales hay impresiones. ¿Qué impresión hay al detrás de la idea de sustancia y de las tres sustancias cartesianas? Sólo tenemos impresiones de las calidades sensibles de los cuerpos (forma, tamaño, peso,...; color, olor, gusto,...), no del soporte de estas calidades, que es lo que llamamos sustancia. La sustancia o soporte de una entidad no es más que una colección de ideas asociadas, unidas mediante la imaginación.

El yo pensante, alma, sujeto, mente o identidad personal era visto por los racionalistas como el núcleo inalterable de la propia personalidad. Pero el radical Hume no encuentra ninguna impresión a la idea de alma o de mi yo, sólo encuentra un haz o colección de percepciones, no un hombrecillo dentro de mí como soporte de estas percepciones. .